Equidad de Género en Salud Digital

Por Joseline Carías Galeano

Dado el papel fundamental que ocupan la ciencia, la tecnología y la innovación como ejes esenciales en la salud digital y principalmente para un mejor desarrollo socio económico a nivel global, es de suma importancia que las mujeres participemos plenamente y de manera equitativa en estas actividades. Si bien es cierto que en las últimas décadas hemos experimentado avances importantes, aún existen numerosos obstáculos que nos frenan. Estas brechas de género son difíciles de medir ya que lamentablemente existen pocos datos e indicadores disponibles para estudiar estos fenómenos y más aún en el ámbito de la salud digital. 

Aunque la brecha de género se ha ido cerrando considerablemente en los últimos años, aún se mantienen vigentes barreras tanto horizontales como verticales que se reflejan en una presencia femenina reducida en ciertas disciplinas de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (carreras STEM por sus siglas en inglés), y también en las ocupaciones que fuertemente han sido masculinizadas, y que generan dificultades para las mujeres en alcanzar los puestos de alto liderazgo en diversas esferas de los sistemas organizacionales.

Las brechas en la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas en América Latina y el Caribe son muchas, entre las que podemos mencionar la brecha digital, la brecha educacional, la brecha laboral y la brecha salarial.

Brecha Digital

Sobre la brecha digital podemos mencionar que el acceso y uso de las TIC son clave para expandir las oportunidades de las mujeres. Los avances tecnológicos están teniendo grandes impactos en nuestra manera de trabajar, de aprender y, de forma general, en nuestra manera de interactuar. Tener acceso a las nuevas tecnologías y contar  con  las  habilidades  necesarias  para  usarlas resulta  esencial  para  obtener  los  beneficios  que los  avances  tecnológicos  pueden  brindarnos, por ejemplo, mejorar las posibilidades de obtener un mejor empleo y minimizar sus riesgos, como por ejemplo, el desempleo como resultado de la automatización.
Según este estudio publicado por el BID “¿Desigualdades en el Mundo Digital? Brechas de Género en el uso de las TIC” , en términos de brecha de género en el acceso y uso de las TIC,  América Latina y el Caribe se encuentran mejor posicionados que otras regiones en desarrollo del mundo, aunque los buenos resultados regionales esconden  diferencias  importantes  entre  países: 

  • Las brechas de acceso a internet oscilan entre los 4 puntos porcentuales en favor de las mujeres en Argentina y los 18 puntos porcentuales en favor de los hombres en Perú. 
  • En el periodo comprendido entre 2017 y 2018, el porcentaje de acceso a internet en la región fue del 63% para los hombres y del 57% para mujeres, mientras que el acceso y uso del teléfono  móvil  fue  del  83%  para  hombres  y  el  80%  para  mujeres.  
  • Esta  realidad  contrasta  con  la  de  otras regiones en desarrollo donde las brechas de género son más acentuadas. Por ejemplo, en el sur de Asia, la brecha de acceso al teléfono móvil alcanza los 23 puntos porcentuales.

Brecha Educacional

Sobre la brecha educacional podemos mencionar que los empleos del futuro están en las áreas antes mencionadas en las que las mujeres hemos estado históricamente subrepresentadas. Temas como la salud en tiempos de pandemia, la lucha contra el cambio climático, las telecomunicaciones en un mundo globalizado o la robótica y la inteligencia artificial, dependen ampliamente de estas disciplinas, que tienen el potencial de proporcionar los conocimientos necesarios para alcanzar sociedades más prósperas, más sostenibles y más inclusivas a la luz de los Objetivos de Desarrollo del Milenio y la Agenda 2030. Esta segregación educativa provoca que las mujeres nos encontremos rezagadas con respecto a los hombres en el uso de las habilidades digitales cognitivas para el uso de las tecnologías y en el empleo en sectores tecnológicos y de la salud digital. Esto a su vez implica un riesgo de exclusión de los potenciales beneficios de la innovación tecnológica. 

¿Y qué decir de la brecha laboral? 

Las ocupaciones STEM son las de mayores ingresos, pero tienen los porcentajes más bajos de mujeres trabajadoras, si aun no lo creemos, veamos las siguientes cifras que lo resumen todo:

¿Y sobre la brecha salarial?

Definitivamente que hay mucho por decir. Si bien la participación femenina en la fuerza de trabajo  ha aumentado de manera significativa en los últimos años,  la remuneración por hora de las mujeres en la región es, en promedio, un 17% menor que la de los hombres de la misma edad,  con el mismo nivel educativo, misma  cantidad  de  hijos  en  el  hogar, misma condición geográfica  y mismo tipo de trabajo , esto según datos de la OIT al 2019.  Esto también responde a que las mujeres reciben becas de investigación por montos menores que las que reciben los hombres.

Participación de Mujeres en Salud Digital

  • Según un estudio realizado por Swiss Healthcare Startups, solo el 29% de los fundadores de startups de salud digital son mujeres. 
  • En una encuesta a más de 100 mujeres de la industria en Europa, realizada por HIMSS, más del 80% de las encuestadas dijeron que sentían que su contribución a la industria no era reconocida, y más del 60% mencionaron que habían encontrado discriminación de género en el lugar de trabajo.
  • Este mismo estudio arroja que solo el 10.2% de los CEO en las empresas de salud digital son mujeres. 

Desafíos para el futuro de la salud digital.

Pues bien, cerrar las brechas de género en salud digital es prioritario para igualar oportunidades y evitar que las mujeres queden rezagadas. El objetivo de desarrollo sostenible número 5 “Igualdad de Género” que en su meta 5.5 insta a los países a trabajar para asegurar la participación plena y efectiva de las mujeres y la igualdad de oportunidades de liderazgo en todos los niveles de decisión es prioritario en las agendas de todos los tomadores de decisión. 

Entre los desafíos a futuro podemos mencionar:

  • Urge crear planes de acción para apoyar el diseño y la implementación de instrumentos y actividades que incentiven la participación de mujeres en salud digital.
  • Urgen estrategias y políticas nacionales para atraer a las niñas y a las mujeres a las profesiones STEM que en el futuro les permitan ocupar puestos de decisión.
  • Se debe profundizar la inclusión de la igualdad de género en las carreras STEM en la legislación de nuestros países.
  • Debemos reforzar la colaboración interinstitucional a través de, por ejemplo, la creación de campañas de promoción y sensibilización de la igualdad de género y del liderazgo de mujeres en salud digital.  
  • Es preciso incentivar el debate y el intercambio de experiencias y buenas prácticas de igualdad de género en salud digital a nivel comunitario, nacional, regional y global.
  • Se deben crear políticas de largo plazo, políticas que son necesarias para abordar y supervisar los cambios. 
  • Se debe priorizar la creación de cursos de formación específicos en salud digital y liderazgo para mujeres. 
  • Finalmente, fortalecer las redes de salud digital y darle espacios de toma de decisión a las mujeres. 

Escrito por Joseline Carías Galeano, Gerente General y Coordinadora de la Comisión de Equidad de Género e Inclusión Social de la Red Centroamericana de Informática en Salud-RECAINSA y CEO en DESISCOM.

Las opiniones expresadas en este artículo son responsabilidad exclusiva del autor y no reflejan necesariamente la opinión de la Junta Directiva y del Equipo Coordinador de la Red Centroamericana en Informática en Salud.

1 Comments

  1. Esmeralda

    Responder

    Excelente reflexión y muy a lugar en el marco de este desarrollo tecnológico que avanza a pasos de gigante a nivel mundial.

Leave Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *