El 14 de diciembre recién pasado, la Alianza de Bienes Públicos Digitales compartió su Informe Anual 2021. Este informe ha sido redactado con los aportes de más de 20 organizaciones que trabajan en el ecosistema de los bienes públicos digitales, y muestra no solo el trabajo de la DPGA (Digital Public Goods Alliance, por sus siglas en inglés), sino también el suyo.
A lo largo del 2021, la DPGA ha evolucionado hasta convertirse en una red mundial con miembros formales en expansión y un amplio grupo de partes interesadas que llevan a cabo actividades de promoción de los bienes públicos digitales. El objetivo común de todos ellos es acelerar la consecución de los objetivos de desarrollo sostenible en los países de bajos y medianos ingresos facilitando el descubrimiento, el desarrollo, el uso y la inversión en bienes públicos digitales, lo cual es la misión de la DPGA.
El 2021 ha sido un año en el que los bienes públicos digitales (BPD) se han convertido en una parte fundamental de la “caja de herramientas” a nivel global para hacer frente a los desafíos continuos y emergentes. Las soluciones digitales de alta calidad y de código abierto han ocupado un lugar destacado tanto en las respuestas a la pandemia como en el proceso de recuperación.
El informe 2021 muestra el poder de los bienes públicos digitales. Durante este año:
- El Programa G2Px del Banco Mundial proporcionó asistencia técnica a 34 países sobre el diseño técnico y la implementación de los pagos digitales G2P.
- La Fundación eGov apoyó al Gobierno de Jamaica en los preparativos para la implantación de los certificados de vacunación de COVID-19 utilizando DIVOC. DIVOC ya se ha utilizado para generar más de mil millones de certificados seguros y verificables de prueba de vacunación para COVID-19 en la India, Sri Lanka y Filipinas.
- Las repúblicas de Estonia, Finlandia e Islandia siguieron ampliando sus esfuerzos más allá de sus propias fronteras a través del Instituto Nórdico de Soluciones de Interoperabilidad (NIIS), una entidad sin fines de lucro que apoya los componentes transfronterizos de la infraestructura pública digital, entre ellos el DPG, X-Road.
- Sierra Leona pudo ahorrar a sus ciudadanos un total de 1,94 millones de dólares gracias a la implementación de plataformas de servicios gubernamentales que utilizan USSD y SMS para la prestación de servicios.
- Public Digital investigó y escribió una guía para gobiernos y financiadores “Código abierto en la administración pública: Creando las condiciones para el éxito (Open Source in Government: Creating the Conditions for Success)”, cuyo objetivo es ayudar a los gobiernos a utilizar con éxito el software de código abierto, incluyendo los bienes públicos digitales.
- UNICEF y la OMS lanzaron en abril el Centro de Excelencia en Salud Digital (DICE). Su trabajo destaca la importancia de las inversiones en bienes públicos digitales antes de las emergencias.
…y eso es sólo la punta del iceberg.
Dentro el contexto de la pandemia de COVID-19, ha crecido rápidamente el apoyo a la idea de los bienes públicos digitales, impulsada por el reconocimiento de que el proceso de transformación digital necesita urgentemente herramientas eficaces, fácilmente adoptables y adaptables, y abiertas.
A través de actividades conjuntas e independientes, los expertos individuales, las organizaciones multilaterales, los gobiernos, las empresas del sector privado y la sociedad civil están ayudando a alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible a través de los bienes públicos digitales. El informe también destaca el trabajo de las actividades principales de la DPGA, el creciente impulso en todo el ecosistema de los DPG y una colaboración sin precedentes. De cara a 2022 y más allá, esperamos aprovechar este impulso, invitar a más partes interesadas a formar parte del movimiento y hacer evolucionar la diversidad y la fuerza del ecosistema. Se necesitará un esfuerzo concertado entre geografías, instituciones y sectores para alcanzar estos objetivos, pero juntos somos más que la suma de nuestras partes.
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Artículo escrito por la Digital Public Goods Alliance y traducido al español por Camila Canelas, estudiante de la carrera de Ingeniería de Sistemas, Informática y Ciencias de la Computación de la Universidad Galileo de Guatemala y Digital Development Designer en la RECAINSA – Red Centroamericana de Informática en Salud.
Las opiniones expresadas en este artículo son responsabilidad exclusiva del autor y no reflejan necesariamente la opinión de la Junta Directiva y del Equipo Coordinador de la Red Centroamericana en Informática en Salud.